Entre todos la mataron y ella sola se murió,así reza el refranero español,y eso es lo que ha pasado en España con la educación-enseñanza. Desde que comenzó la democracia, los políticos no han tenido la visión y la generosidad suficiente para considerar este tema tan importante, como un asunto de estado, sino que cada partido lo ha tratado como un campo a sembrar con sus propias formas de enfocar la vida y recoger el día de mañana una cosecha afín con la semilla sembrada. Nefasto error, cuyas consecuencias las estamos sufriendo hoy dia.
La labor educativa es muy compleja y necesita tener en cuenta muchas variables, hay que valorar, porque es totalmente necesario,el esfuerzo personal, la responsabilidad,l a sensibilidad por las materias a estudiar y el enriquecimiento que éstas nos proporcionan y que nos van formando como personas.
Pues bien, muchas de las leyes, emanadas de la legislación sobre enseñanza, no han inculcado para nada ninguna de estas variables, totalmente necesarias, sino todo lo contrario. En lugar de valorar y estimular el trabajo, el esfuerzo, la superación... se han ignorado estos temas y claro, sin trabajo y estudio no se pueden conseguir niveles aceptables en los resultados conseguidos por los alumnos.
Otro de los errores nefastos ha sido la inadecuada corrección de las conductas no correctas de los alumnos, llegando a tales extremos, que en muchos centros, no existe el ambiente apropiado para desarrollar una docencia con normalidad.
Al profesor se le ha privado de su auténtica autoridad para que pueda llevar a buen término la labor que tiene encomendada de educador-enseñante.
Solamente he apuntado algunos de los puntos que han influido negativamente y que nos han conducido al estado actual de malos resultados, hay muchos más: medios materiales, padres, profesores, medios de comunicación, ambiente social etc...pero la extensión de este escrito no permite desarrollar.