domingo, 31 de julio de 2016

Pinceladas 116


  •  La suerte sí existe, alguna vez llama a tu puerta, pero la inmensa mayoría de las veces tienes que buscarla afanosamente.
  • Es casi imposible convencer a un fanático, porque es que goza con su fanatismo.
  • Hay gente en esta vida que le sobra el sol, prefiere vivir  en tinieblas
  •  ¿Dudo? Luego pienso.
  • Hemos huido de la naturaleza y nos hemos encerrado entre cuatro paredes.
  • Envejecer es ver cómo la vida se te cae a jirones.
  • El único animal que ha creado fronteras es el hombre.
  • Las fronteras son las rayas del egoísmo. 
  • Querer razonar con un fanático es predicar en desierto y majar en hierro frío.
  • Al fanático no se le cura ni con un trasplante de cerebro.
  • Con los ladrillos del habla de la antigua Grecia construimos nuestros neologismos.
  • Tenemos que borrar el desprecio que el pensamiento cristiano sentía por la materia.
  • No es bueno vivir de costumbres ni de modas. Hay que vivir de convencimientos.
  • No es justo que unos vivan en el derroche y otros en la indigencia.
  • Se ha exagerado en demasía el derecho a la propiedad, ya que los legisladores siempre han sido los poderosos y acaudalados.
  • Es un error que los mayores, que acumulan más sabiduría, no sean los que dirijan los pueblos.
  • La distancia apaga la luz de los sentimientos, le pasa como a las estrellas, que casi no notamos su presencia, porque a pesar de ser una explosión de luz, la lejanía la oculta.
  • No tomes como compañeros, de tu caminar por la vida, ni al pesimista ni al optimista, ninguno de los dos te llevará por el camino real.
  • El hombre sabio, con su sabiduría, no pretende crear seguidores, sino buscar la esencia de las cosas.
  • La persona inteligente nunca toma en serio a los que tratan de ofenderle.