lunes, 20 de febrero de 2012

No quiero imitar la mente

No quiero imitar la mente
de pensadores que olvidan
los colores más humanos
que dan luz a nuestras vidas.

Que recrean los pensamientos
de fantásticos vigías
que quieren ver horizontes
creados por  fantasías.

Y olvidan la realidad,
el vivir de cada día,
y se pierden en sofismas
que distraen nuestras vidas.

No quiero seguir costumbres
desfasadas, y que olvidan
el progreso y la verdad,
ancladas en la desidia.

No quiero seguir la senda
del flautista, que cautiva
a ignorantes desgraciados,
y que sus mentes domina.

No quiero más divisiones
entre pueblos, que cultivan
el egoísmo y el odio,
llevándolos a la ruina.

Yo quiero compartir ideas
con el que la paz persiga,
valorando lo que viene
y aprendiendo de la historia.

Quiero dejar a mis nietos
un mundo sin guerras frías,
donde los hombres se esfuercen
por vivir en armonía.