lunes, 19 de septiembre de 2011

Dictadura nacionalista

El Sr. Artur Mas es un político antidemócrata y dictatorial, solamente respeta su forma de ver las cosas y quiere imponerlas al resto de los ciudadanos, negando la realidad de los hechos. Y la realidad de los hechos es que en Cataluña hay más ciudadanos que conocen el castellano que el catalán, y que tienen derecho a recibir la enseñanza en esta lengua y que la inmensa mayoría del pueblo aprueba que la enseñanza se imparta  en catalán y castellano.

Mas se está comportando como Franco, pero al revés. En muchas cosas es tan dictador como él. Con el debido respeto a todas las lenguas del territorio nacional, pero no por esto vamos a ocultar la verdad, hemos de decir que el catalán,saliendo de Cataluña, es una lengua sin interés alguno, por el contrario el castellano es un idioma que hablan unos 500 millones de personas y que te puedes mover por todo el mundo con ella. Es un disparate privar a los ciudadanos de Cataluña del conocimiento de esta lengua, pero el fundamentalismo de este señor está por encima de todo, esta clase de políticos hacen una labor nefasta para sus pueblos.

En una democracia, no se puede admitir que haya personajes, que por principio, no admitan de la Constitución nada más que lo que favorece a su independentismo destructor de una nación que tiene siglos de existencia y que el resto de los españoles no vamos a consentir. Estos partidos, que se han tolerado, pro bono pacis, para que no se tiraran al monte, se están convirtiendo en un contínuo problema para España, y esto se podría evitar si tanto PP como PSOE olvidaran sus rencillas e intereses egoistas y formaran gobiernos fuertes, donden no hubiera lugar a los chantajes a los que nos tienen acostumbrados.

A mentalidades semejantes, los ciudadanos no les importamos lo más mínimo. Acaban de tomar PP y PSOE una de las decisiones más elementales y razonables del mundo, poner un techo al endeudamiento público, pues bien, este señor no lo admite, quiere seguir gastando lo que tiene y lo que no tiene, y el que venga detrás que arree, o mejor, que el resto de los españoles le paguemos sus derroches. Me dan náuseas esta calaña de políticos.