domingo, 29 de noviembre de 2009

El maestro

Modelos inacabados
esculturas sin hacer
somos los seres humanos
imperfectos, al nacer

Mentes lúcidas de niños
voluntades inocentes
vidas que empiezan su ruta
alegres y sonrientes.

Esta es tu misión, maestro,
educación y enseñanza
no existe labor más bella
ni meta más agraciada.

Sembrador en blanda tierra,
fértil, limpia y bien labrada,
la semilla crecerá
con tu trabajo y palabra .

Tú cambias la sociedad
con tu labor silenciosa,
el saber y el razonar
vale más que cualquier cosa.

De paciencia y comprensión
te armas todas las mañanas,
y a tu clase te diriges
hasta el fin de la semana.

Orientas con ilusión
a los alumnos que acuden
a consultar cualquier tema,
o a comprender un resumen.

Explicas con claridad
muy despacio y dialogando
para captar la atención
de los que están escuchando.

Siempre preguntas al fin
si tienen alguna duda,
y les das tu confianza
a que a resolverla acudan.

De la sociedad pilar
y cimiento necesario,
los niños sin tu labor
crecerían en precario.

Los pueblos que sabiamente
gastan dinero en cultura,
no lo gastan, mas lo invierten
en la riqueza futura.

La sociedad que no cuida
maestros y profesores
no logrará que sus hijos
cada día sean mejores.