jueves, 29 de septiembre de 2011

Sobran ayuntamientos

"El nuevo presidente de la Federación Canaria de Municipios (Fecam) Manuel Ramón Plasencia, alcalde de la localidad gomera de Alajeró, ha afirmado tras su designación que "no sobra ninguno de los 88 municipios en los que está estructurado administrativamente el archipiélago".

Disiento totalmente con este señor. En España y en Canarias sobran muchos municipios, somos un país que con cuatro vecinos hemos constituido un ayuntamiento, con todos los gastos que esto conlleva. Se ahorraría mucho dinero, en gastos innecesarios, si se agruparan los municipios y por tanto sus servicios. La única dificultad estriba en que los señores políticos no están dispuestos a perder su puesto privilegiado. En este tema, como en muchos otros, el problema son los políticos.

Las autonomías fue una concesión para contentar a los separatistas y que no se tiraran al monte. Este ha sido el gran problema que se ha creado, sin ser necesario para el pueblo, sino para colocar políticos y que se hicieran con el mando, las influencias y el dinero. Es un lujo que ni las naciones ricas se lo pueden permitir.

En España tenemos 5 clases de gobierno : Comunidad Europea, Gobierno Central, Gobierno autonómico, Diputaciones provinciales o Cabildos y Ayuntamientos. Una barbaridad, y un gasto, en cosas no necesarias, que impide que ese dinero se emplee en servicios necesarios. Ya que, por lo visto, no se está por la labor de suprimir los reinos de Taifas, que esa sería la solución, habrá que hacer algo para que esta pesada máquina administrativa se pueda mover, ya que el gasto en combustible es desorbitado.

Mucho se ha hablado de la unión Santa Cruz-Laguna, pero todo ha quedado en palabras. El Valle de la Orotava tiene una unidad geográfica natural, no hay por qué dividirlo en tres municipios, con uno solo bastaría. Y esto por poner dos ejemplos, en las islas se podrían reducir los ayuntamientos a la tercera parte. Esto nos permitiría mejorar los servicios y dedicar menos dinero a políticos y burocracia y más a los ciudadanos.

Si las cosas se hicieran con cabeza y mirando por el bien común, no hubiéramos llegado a esta crisis y las cosas funcionarían mucho mejor.