lunes, 8 de julio de 2019

Invitacion a las abejas.

Vivo entre flores y plantas,
un edén sobre la Tierra,
todo el día me acompañan
en mi soledad postrera.

Yo las cuido con esmero,
las mimo, y ellas, coquetas,
tornan sus bellas corolas
y me sonríen contentas.

Pero no sólo es mi casa,
más que mía es de las abejas,
de los mirlos enlutados
y de las aves trigueñas.

Las flores abren sus pétalos
irradiando su belleza,
y reclaman a porfía
el pose de las abejas.

Son invitadas de honor,
de mi jardín son las reinas,
ellas visitan las flores
volando hacia sus colmenas.

Polen llevan en sus patas,
cargadas van las obreras,
intercambian generosas
el néctar por rica siembra.

Simbiosis que produce
dulces frutos en la tierra,
y semillas a raudales,
que recubren la floresta.

La semilla es un milagro
que crea la naturaleza,
bebés plantas que dormitan,
si Ceres no los despierta.

Pero si el agua las baña
en cuna de blanda tierra,
se desperezan,  y brotan
plántulas verdes y tiernas.
                  
Abejas de mi jardín , 
 sois aladas mensajeras
de la vida que renace,
 cada año, en primavera.