sábado, 23 de mayo de 2009

La política que sufrimos

Estamos sufriendo una política que ninguno de los españoles nos merecemos. El otro día hablaba con mi amigo Pepe y me decía: Hay que tener mucho cuidado, hoy, para pedir que un político dimita cuando sus - iba a poner enemigos, pero bueno, diré adversarios-, cuando sus adversarios lo acusen de alguna ilegalidad, porque corren por ahí rumores de que se está poniendo en práctica una táctica que consiste en : acusa, sea verdad o mentira, que siempre algo queda.

Los padres de la patría y su cortejo de acompañantes, con sus medios de comunicación se han lanzado a quitarse de en medio a aquellos políticos de otros partidos a los que no se les puede vencer en las urnas, y que gozan de prestigio por la labor bien hecha y los logros alcanzados. Se les acusa de cualquier nimiedad o se le inventa una historia poco edificante. Cuando llegue el juicio, aunque se aclare que no es culpable de nada, el daño ya está hecho, se le ha tenido durante el tiempo que ha tardado en juzgarle, angustiado y pendiente de este asunto, su familia también ha sufrido, y si el partido al que pertenece lo da de baja, objetivo conseguido. Si no,al menos se le ha desprestigiado ante la opinión pública. Pero lo peor del caso es que los calumniadores se van de rositas y aquí no ha pasado nada. No, señores jueces, a los calumniadores hay que juzgarlos y condenarlos por los delitos cometidos y por el mal ocasionado.

La situación política actual no es nada agradable y menos edificante , el ejemplo de pelea rastrera y mal educada al que asistimos, las acusaciones, las descalificaciones, la corrupción, el apego a la poltrona, el mal gobierno, las mentiras, las medias verdades, el cambiar el sentido de las manifestaciones del otro, el no reconocimiento de la verdad del adversario nos está creando un clima muy desagradable. Menos mal que la vida política , por su mal proceder, está formando un gueto aparte, se está separando de la vida del ciudadano, porque éste no la puede tomar en serio y sintonizar con ella. ¿Qué sucedería si el ciudadano aprendiera del político y se comportara igual que él ,creando un ambiente social de lucha y crispación ?...
Lo peligroso de todo esto es que se va creando un caldo de cultivo propicio para que se repita la mala experiencia que sufrió España con la segunda república. Cuando los políticos no se comportan como tales dan ocasión a que salgan salvadores de la patria que nos conduzcan a donde nadie queremos. Señores políticos, los ciudadanos de a pié os llamamos al orden, y por el bien de todos os exigimos que cambieis de actitud y de aptitud.

¿Lavado de cerebro, o ensuciado ?

Hay una frase común que a mi siempre me ha llamado la atención, porque además de ser incompleta, no es del todo verdadera. Nadie tiene interés alguno en lavar el cerebro a otro y dejárselo blanco e impoluto, no, este lavado tiene como objeto el borrar las ideas preexistentes y una vez dejado el papel en blanco y disponible, escribir de nuevo, aquellas ideas que queremos sembrar y que no podían crecer con las anteriores porque entrarían en competición por su existencia, como les acurre a las plantas cuando quieren crecer muchas en un pequeño espacio.El lavado de cerebro siempre lleva adosado un "ensuciado" del mismo. Por lo que más que lavado de cerebro se debería decir ensuciado de cerebro.