Quiero liberar mi espíritu
de jaulas de doble juego,
de ataduras que lo esposan
con oropeles de necio,
de cargas innecesarias,
de maquillajes no buenos,
de disfraces que me ocultan
los sentimientos sinceros,
de apariencias engañosas,
que, raudo, se lleva el viento,
de dignidades vacías
que encumbran a los soberbios.
No quiero pesos que impidan
caminar por los senderos
de libertad, compartida
con la humanidad, que quiero.
Yo me quiero liberar
de aquellos recuerdos viejos
que atenazaban mis alas
con el peso de otros tiempos
No quiero que me atosiguen
tantos mandatos impuestos
por los que mueven los hilos
de marionetas de cuento.
No quiero pintar mi alma
con los colores adversos
que los hombres interponen
para luchar entre ellos.
Cuando mi mente se cambia
buscando caminos nuevos,
dejando torpes creencias,
el sol muestra sus reflejos.
domingo, 19 de septiembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Un poema bastante intenso y vibrante. Increíble cada verso, cada palabra… el todo. Desde luego que estos poemas son sacados del alma, deja fluir la pasión en ellos. Enhorabuena!!
ResponderEliminar