Las caras del agua

Libre corre por el río,
ha nacido en las montañas,
en manantiales que brotan
en saltarinas cascadas.

Trasparente, cristalina,
espejos forman su cara,
y los árboles se miran
en la corriente que pasa.

Perlas derrama si llora
en las noches de bonanza,
y las hojas las recogen
como joyeros de plata.

Si no le gusta el paisaje,
lo cubre con niebla capa,
expulsando a Helios vivo
para que no vea su cara.

A veces en los picachos
se pone su bata blanca,
desafiando a la noche
y a su obscura ropa parda.

Pero si Bóreas domina,
sembrando su fría escarcha,
estiletes cristalinos
forma para su venganza.

En las noches de tormenta,
si es que Zeus la maltrata
y precipita a la tierra,
enfurecida se enfada,                        

y  torrentes furibundos
forma con ira y con saña,
arrastrando poderosa
hasta a las mismas montañas.

Pero si el sol y la luna
la visitan y acompañan,
complacida los recibe
serena, clara, diáfana.