Fútbol.Semifinales C.Confederaciones

Los representantes del fútbol español , que han hecho declaraciones después del partido de las semifinales de la Copa de Confederaciones , se han ido por las ,no por las ramas, sino por la hojas, y no han querido reconocer las causas por las que se ha perdido el partido, han dicho cuatro palabras para escapar y cumplir con el compromiso que tienen con la prensa y parece ser que nos consideran tontos a los aficionados. Como ellos no han querido decir la verdad, porque a veces las verdades pican, y ésta es una de esas veces, vamos a analizar nosotros el partido.

No se puede llegar a una semifinal, creyéndonos que el rival es inferior y que por lo tanto, con jugar en el segundo tiempo es suficiente para vencerlo. Yo me pregunto ¿En qué es inferior, en técnica ?.-Admitámoslo. ¿Pero es inferior en garra, en velocidad, en altura, en defensa, en concentración, en motivación ?.- Evidentemente no. Nadie gana un partido solamente por la técnica si no va acompañada de otros factores.

En el primer tiempo se perdió el partido. Los jugadores salieron sin ganas sin garra, no corrían, hasta se pasaban mal el balón, daba la sensación que aquello no iba con ellos. No estuvieron en el partido, estaban totalmente confiados de que a una selección inferior, sobre el papel ,le iban a ganar sin esforzarse mucho. Grave error, que el Sr. Del Bosque no corrigió.

Los dos goles, regalo de la defensa, confirman la falta de concentraron de los jugadores, el primero indica que ni el catón del fútbol, parece a veces ,que conocen algunos, marcar a un delantero por detrás, dejándole todo el campo libre por delante, esto no se le ocurre ni al que asó la manteca, y del segundo qué vamos a decir, ni de niño chico de colegio, en esas ocasiones hay que despejar el balón con la máxima rapidez.

Y llegó el segundo tiempo, con las prisas, con el nerviosismo, volviendo a las andadas de tiempos pretéritos. Con una defensa bien armada y con hombres altos y rápidos, es inútil lanzar balones
a la hoya, se le suma que ellos están de cara y tienen toda la ventaja, en estos casos hay que jugar por las bandas y centrar en corto y por bajo. Lo que no se había hecho en el primer tiempo, se quiso hacer en el segundo, pero las prisas nunca son buenas.

En resumen: partido mal planteado, y peor jugado, sin valorar las cualidades del contrario, para contrarrestarlas adecuadamente.