- La mitología ha infestado tanto la historia que es difícil distinguir su frontera.
- Seguimos, después de tantos siglos, transitando por los mundos de dioses y héroes.
- Si le das una limosna a un pobre, alégrate por ser el que la da y no el que la recibe.
- Nada cuestan las palabras amables y son muy valiosas para el que las recibe.
- La inteligencia y la bondad son dos hermanas gemelas.
- Si llamamos a los hombres caballeros, porque antiguamente montaban a caballo, hoy les tendríamos que llamar cocheros, porque montan en coche.
- A los poetas se les conceden ciertas licencias, en el uso del lenguaje, para que puedan embellecerlo más.
- Qué clase de demócratas tenemos, que no reconocen más realidades que las suyas.
- Los sectarismos están en las antípodas de la democracia.
- Nuestros políticos siguen contaminados de sectarismo, porque han tirado por la borda el espíritu de la transición, que es lo que quería y quiere la mayoría del pueblo.
- A veces, parece que tenemos unas prisas tremendas por llegar a ninguna parte.
- No hay que pasarse, y poner tan alto el faro que lo tapen las nubes.
- Si no educamos a nuestros hijos en valores, estaremos creando una sociedad de pícaros.
- La contemplación de la belleza siempre es un placer, y mucho más si se personifica en una mujer.
- Aunque nos desagrade el reconocerlo, los gobernantes los ponemos nosotros, y salen de nuestra sociedad.
- Hay quien vive su auténtica vida en los días de carnaval, el resto del año vive disfrazado.
- Es una barbaridad cómo los humanos nos complicamos la vida, y encima nos creemos los seres más inteligentes.
- Cada día me convenzo más de que la vida no merece la pena de tomársela en serio.
- La verdad es un ave que hace tiempo levantó el vuelo de muchos ambientes españoles.
- No puedes confiar en unos gobernantes que mienten cada vez que les interesa.
lunes, 7 de marzo de 2011
Greguerías 32
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