Todo en la vida es perfectible, y el deseo de que las cosas se hagan cada vez mejor, sin cometer errores, es propio de mentes inteligentes y de personas que desean que la vida, en todos sus órdenes, progrese con el tiempo. Esto claro está es enemigo del tradicionalismo cerrado y anquilosado en el tiempo, que no tiene más razón de ser que la cabezonería y la cerrazón.
Las normas que rigen el deporte más universal, el fútbol, se han quedado anticuadas, muchas de ellas, y otras, aunque más recientes, son poco acertadas, porque impiden la mejora del deporte y del espectáculo. Parece que sus directivos pertenecen a la antigua escuela dinosáurica de los hombres primitivos y están peleados con el progreso del siglo XXI. Se nota que los que dan las normas no son los jugadores, que tienen que sufrirlas, de lo contrario, otro gallo cantaría.
Es urgente ya el uso de los medios técnicos, que emplean otros deportes, para evitar los errores, que a veces, cambian totalmente el resultado final de un partido, y esto, pudiéndose evitar, no hay justificación alguna para no hacerlo, a no ser que haya intereses ocultos de por medio, lo que todavía sería peor. Algo parecido al ojo de halcón en el tenis, habría que usar en las jugadas donde hay duda y son determinantes para el resultado.
Hay normas que en nada favorecen al fútbol, vamos a comentar algunas:
1ª.- Cuando por una falta se pita penalti, expulsión, tarjeta roja y privación de poder jugar uno o varios partidos.Cuatro castigos por una sola falta. Esto es un ensañamiento innecesario y perjudicial para el deporte y para el espectáculo. Yo lo calificaría de sadismo vengativo, una actitud que está totalmente reñida con el espíritu deportivo. Con señalar penalti sería suficiente castigo.No hay que hundir ni al deportista ni al club. Los que aprobaron esta norma, no entienden lo que es el deporte.
2ª.-No hay por qué agotar físicamente a los jugadores. Para ello hay que permitir que se puedan hacer todos los cambios que se deseen, como en el baloncesto o balonmano.
3ª.-Administrar un solo castigo por falta.
4ª.-Las tarjetas amarillas y rojas hay que sacarlas únicamente en casos graves, en los que peligre la integridad física del jugador y no por cualquier tontería, como sucede en la actualidad.
5ª.-Si se expulsa a un jugador, transcurrido un tiempo, que se permita sustituirlo por otro, para no perjudicar el juego.
6ª.-El llamado fuera de juego habría que suprimirlo, no hace nada más que crear problemas y restarle vistosidad al espectáculo.
Creo que el fútbol ganaría mucho si se tuvieran en cuenta estas innovaciones, sobre todo el espectáculo.
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