Las Cajas de Ahorros en España nacieron con una misión muy clara, eran obras sociales, la mayoría de ellas estaban ligadas a la Iglesia Católica y en menor número a personajes altruistas que sentían la obligación de ayudar a los necesitados.
Tenían como finalidad fomentar el pequeño ahorro y atender, por medio de préstamos, las necesidades de los campesinos, sobre todo, en los años de malas cosechas. Comenzaron como pósitos de cereales, primordialmente trigo y centeno. Los montes de piedad empiezan en España a iniciativa de los frailes franciscanos, quienes prestaban pequeñas cantidades de dinero, sin cobrar interés alguno, gracias a las donaciones que recibían de los fieles.
En la época de mi juventud, las cajas de ahorro eran símbolos de buen hacer, de ganar dinero y emplearlo en obras sociales. Al carecer de accionistas y no tener que repartir dividendos, todas sus ganancias, después de cubrir gastos, les quedaban libres para dedicarlas a obras sociales. Yo mismo tuve relación directa con una de ellas, la Caja de Ahorros de Ronda. En Manilva, en su parte costera está la playa de Sabinillas, y en ella, la Caja tenía unas colonias de verano, con buenas instalaciones, a las que acudían, totalmente gratis, niños y niñas de todas las provincias donde estaba asentada la Caja. Yo estuve varios veranos en estas colonias, desempeñando el papel de educador. Todas las referencias eran de una gran solvencia económica, por parte de la institución.
Pero llegó la política a las cajas, y con ella cambiaron su rumbo hasta la situación en que están actualmente, descapitalizadas, mal administradas, cuando no saqueadas. Se volvieron locos los que las regían, queriendo ganar más y más. No tuvieron en cuenta para nada la tasa de riegos y concedieron préstamos a troche y moche, políticos y sindicalistas dispusieron de sus activos hasta agotarlos y asfixiarlos, y este es el resultado,
63 mil millones de euros perdidos y despilfarrados.
Claro que hay que juzgar a los reponsables de Bankia y pedirles reponsabilidades de su gestión, y sobre todo que devuelvan hasta el último céntimo. Pero no solamente a los dirigentes de esta entidad, sino a todas las que hayan cometido irregularidades, que no son pocas. La justicia debe aplicarse a todos.
P.D. De nuevo me encuentro en Los Realejos, después de estar ausente una semana. Tengo que mostrar mi agradecimiento a los médicos y personal sanitario de Hospitén Rambla, por su profesionalidad y buen trato.
El blog lo dejé programado, y por eso no se ha notado mi ausencia, es que a uno lo educaron en hacer la tarea por adelantado. Muchas gracias también a cuantos se han interesado por mi salud, a través del teléfono. De nuevo gracias y un abrazo a todos.
martes, 24 de julio de 2012
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