La otra cara de los recortes

Así como la crisis que padecemos ha tenido muchas madres, asi también los recortes que estamos padeciendo tienen varias lecturas.

Como vivimos en un país donde la picaresca tiene una tradición de siglos, y en lugar de juzgar esta conducta como malévola y denigrante, se presume de practicarla, y mientras más suculento es el fraude más se regodea el que lo comete, ahora con la necesidad de hacer recortes, porque el dinero no da para más, también han llegado las tijeras a algunos, no a todos, de los excesos que se estaban cometiendo con el dinero público; bien venidos sean.

Muchas manifestaciones se han hecho defendiendo algunos servicios públicos, como si éstos se fueran a suprimir, y no, las cosas hay que decirlas como son. Pongamos algún ejemplo: en algunos sectores de la enseñanza, sobre todo en la universidad y enseñanzas medias, el número de clases que imparten muchos profesores, es a todas luces insuficiente, y esto no es justo, si consideramos las horas de trabajo que tiene el resto de los ciudadanos. A estos profesores, me parece muy bien que se les incrementen sus horas lectivas.

Pero no solamente en el sector de la enseñanza, éste lo he tomado como uno de tantos sectores donde hay que recortar todo lo que es abusivo, superfluo e injusto. Podríamos seguir viendo los gastos de todas las instituciones y los derroches cometidos por los que las manejan a su antojo, sin considerar que el dinero, del que disponen alegremente, no es propio sino ajeno.

Para defender una cosa o una situación indefendible, y que por tanto no existen argumentos convincentes, se echa mano de los tópicos y de las generalidades de siempre, para justificarse ante el pueblo.

El nivel de la enseñanza en España, leamos las estadísticas comparativas con otros países, es muy bajo. Nuestras universidades han nacido como hongos, pero su calidad deja mucho que desear. Se ha trabajado muy poco en dos factores primordiales, en toda actividad humana, el trabajo y la responsabilidad. La calidad es un ave que ya hace años que emigró de España.No se puede estar gastando tanto dinero para obtener frutos tan exiguos.